¿Como puedo ayudarte con la depresión?

Científicamente la depresión es un estado patológico que cursa con una tristeza extrema y una visión negativa de sí mismo, del mundo y del futuro. Un factor necesario para su diagnostico es la anhedonia, es decir, la incapacidad para disfrutar de actividades que antes si resultaban placenteras. Puede llevar al aislamiento e incluso al suicidio.

Te lo voy a explicar con un caso práctico.

Paciente X, llega a consulta muy deprimido por una ruptura amorosa. Después de casi una década de relación, su pareja ha decidido ponerle fin por motivos que mi paciente no entiende. X está muy preocupado porque no entiende nada, su cabeza es un bucle de “¿y por qué a mí?” “¿qué he hecho mal?” “¿y por qué, y por qué, y por qué…?” Esta larga letanía se ha convertido en un mantra para mi paciente, repetido una y otra vez, y le ha llevado a aislarse, meterse en la cama y llorar incesantemente. “Zoraida, y ¿por qué ha tomado esa decisión? ¿¡por qué!?”

A mi paciente X, no le voy a mandar salir de casa y pasear, su cara es de pánico con sólo planteárselo. También sería una idea terrible decirle que puede buscar a otra persona algún día, “pero yo… la quería a ella”.

¿Qué necesita? resolver la incógnita. ¿Por qué lo necesita? hay un claro componente en su personalidad que convierte el control de la situación y su entendimiento en algo necesario e imprescindible. No podrá ser feliz hasta que no entienda el “¿y por qué?” ¿Te das cuenta que cada vez nos estamos alejando más de un puro tratamiento de la depresión? Estamos yendo a la causa del problema (su origen)

Continuemos…¿puedo yo responderle a ese porqué? Realmente, ¿alguien podría? Incluso su misma pareja podría ser incapaz de explicarlo o incluso saberlo. ¡Vaya lío! ¿y ahora qué hacemos? Si piensas un poquito te darás cuenta que la respuesta es sencilla, tenemos que tratar la importancia que X le da al control, al entendimiento, enseñarle a manejar ese sentimiento. También podemos observar como X tiene un bajo valor como persona (se cree poquita cosa) y una clara aversión al rechazo. “Si mi pareja me deja es que claramente no valgo, soy una mala persona”

A lo largo de varias sesiones estuvimos trabajando esto, por fin, X se dio cuenta que tener el control de algo puede ser agradable, pero no es una necesidad. Dejó de preguntarse el porqué de las cosas e inmediatamente ese bucle desapareció, y con él, gran parte de la tristeza. Continuamos trabajando en su personalidad, sigue triste porque perdió a una persona que era importante en su vida, pero nada más, es una tristeza normal, funcional, que maneja con comodidad. Nadie va a pedirle que la olvide para siempre, eso sería ilógico. Ahora su pareja es un bonito recuerdo mezclado con una pizca de añoranza.

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