30 Ene La experiencia o una carta a mi yo del pasado
Psicólogos en Avilés . Psicóloga en Avilés
Hoy, 21 años después de haber comenzado mi formación y experiencia en Psicología, con una clínica abierta desde hace más de una década en Avilés, me gustaría hacer un balance de lo que han significado para mí todos estos años de práctica clínica. Son incontables los pacientes que he evaluado, diagnosticado y tratado como psicólogos en Avilés, pero es aún más increíble para mí todo lo que he aprendido con ellos, formando un equipo.
Muchas veces, la terapia trata de hablar sobre la experiencia, sobre casos ya vistos, equivalentes al que tengo delante. Muchos pacientes se sienten aliviados al comprobar que no son los únicos que se sienten así, que hay otras muchas personas que han pasado o han vivido lo mismo que ellos. Y ahí, es donde entra en juego mi experiencia. Siempre empiezo así: “¿Te apetece que te cuente una historia?” “¡Claro!” Y les relato una experiencia, un caso, algo con lo que ellos se sientan identificados. “Sí, es justo así como me siento, ¿cómo lo sabías?” Bueno, es mi trabajo, suelo responderles.
Para explicaros algo más sobre esto, os voy a proponer un ejercicio. Podéis hacerlo ahora mismo en un papel o simplemente en vuestra cabeza. Vamos a escribir una carta a nuestro yo del pasado, sabiendo lo que sabemos ahora, ¿ok? Yo haré la mía y vosotros la vuestra… ¡Adelante!
Psicóloga en Avilés. Psicóloga Avilés
No importa demasiado la ropa que lleves al colegio, se meterán contigo, igualmente, si quieren hacerlo, y no será tu culpa.
Las botas de goma parecen ridículas, pero tu madre te las pone porque se preocupa por ti, y eso es lo que importa.
Los amigos van y vienen, es agradable tenerlos, pero no dejes de hacer cosas por ti, después de todo, con quien vas a pasar el resto de tu vida es contigo.
Lo mismo pasa con las parejas, seguro que piensas que es un desastre apocalíptico que ese chico te haya rechazado, pero encontrarás otro.
No tengas miedo a estar sola, la soledad es buena amiga en ocasiones. Si no, siempre te quedarán los gatos… o los caballos.
No estarás sola si no quieres estar sola.
Recuerda que, por mucho que Disney te haya inculcado lo contrario, hay muchos modelos de vida, no te cases porque es lo que toca.
Lo mismo aplicable a los hijos. También recuerda que puedes tener un hijo tú sola, es otra opción de vida totalmente válida.
Lucha por lo que quieres, o por lo que crees.
Aparta de tu vida aquello que no te haga feliz o no te valga para nada, aunque pienses que decepcionarás a alguien.
El piano no mola.
Los caballos, sí.
Equivocarte es genial, te ayuda a aprender, no montes dramas por tonterías, aunque ahora pienses que es un mundo. No llorarás eternamente.
Maquillarte como una puerta para gustar a los chicos no es buena idea. Vestirte y arreglarte como tú piensas, sí lo es.
Psicóloga en Avilés. Psicóloga Avilés
Los tacones duelen y son maravillosos a la vez, póntelos solo si tú quieres, y quítatelos si te apetece correr, pero sobre todo, no dejes que nadie de toque los… tacones.
Estás guapa, mucho, y si no lo estás, tampoco pasa nada. Las opiniones sobre tu aspecto son irrelevantes.
Vales más de lo que crees, no te sientas pequeña.
Las propiedades a tu nombre, si somos felices, las compartimos, si no, cada uno en su casa, y Dios, en la de todos. Las etiquetas con tu nombre te serán útiles.
Estudia, mucho, es lo que te llevarás al futuro, desde donde te escribo. Piensa en ti, los libros pueden parecerte aburridos, pero te abrirán muchas puertas más adelante.
¿Ya te he dicho que pienses en ti? Piensa en ti.
No hagas cosas por complacer a los demás, si lo haces por complacer y no porque realmente lo deseas, es que esa persona no te importa demasiado, con lo cual, no tienes que hacer nada.
Bien, creo que hasta aquí, me acabo de dar cuenta que podría escribir durante horas, pero como ejemplo creo que ha sido suficiente.
¡Ahora vamos a hacer algo loco! Coge tu carta, mírala, escríbela si aún no lo has hecho y consideras que es importante, te doy tiempo…¿Preparado?
¡RÓMPELA! No vale para nada, eres lo que eres porque fuiste lo que fuiste. Eres todos tus errores y también todos tus aciertos. Es genial que seas así. ¡Mírate al espejo! Ese que ves… eres tú.
La experiencia te ha hecho aprender, ¿qué sabrías sin ella? ¿Qué serías sin todo lo que te pasó? ¡No tendrías historia! Y quien olvida su pasado, está condenado a repetirlo.
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